Nuestros vermicompostadores, como la gran mayoría de casas no disponen de jardín, terraza o balcón,  se diseñaron para que fuesen muy estéticos y te animes a ponerlo en el interior incluso en un  pequeño apartamento,  pero por su tratamiento también podría estar al exterior. Eso sí, siempre protegidos del sol directo para que no acumulen mucho calor en su interior y resguardados de la lluvia para evitar que entre agua y aumente demasiado el nivel de humedad del interior.

No,

 a pesar de lo que muchos piensan ya que utilizamos restos orgánicos, este proceso  no genera malos olores. El olor siempre será una señal de que estamos haciendo algo mal  como añadir restos no adecuados o más comúnmente  mantener un nivel de humedad demasiado  alto o una mala mezcla de restos frescos con secos. Ambas situaciones conducen a  una falta de aire en la mezcla  que hace que los restos empiecen a pudrirse en vez de descomponerse. En esta situación ni  los microorganismo descomponedores ni las lombrices pueden vivir por mucho tiempo.

Al abrir un vermicompostador y acercarte  debes percibir un olor como a bosque, típico olor a tierra húmeda.

Estamos en contra de obsolescencia programada y procuramos que nuestros productos duren el máximo tiempo posible. Para ello utilizamos maderas especialmente tratadas para resistir el contacto directo con  la humedad y el ataque de  insectos. 

En el caso de la madera maciza, aplicamos un tratamiento calificado como clase de riesgo nº4 de la norma EN-335/1-2 , es para contacto directo con la humedad , autorizado en ecológico  y tiene una garantía de 10 años. No obstante nuestros vermicompostadores de madera van forrados con un material impermeabilizante por el interior para evitar que salgan manchas por humedad   y por el exterior se les aplica una mano de lassur protector color castaño. Con esto mantenemos nuestra madera doblemente protegida para que si cuidamos mínimamente el vermicompostador  dure muchos más años.

En el caso del tablero marino, con el tiempo se irá oscureciendo por el interior pero si se mantiene el exterior con una ligera mano de aceite de linaza cada varios años, seguirá conservando su magnífico aspecto por muchísimos años puesto que es un material muy resistente.

Lo ideal es alimentar con regularidad pequeños restos de frutas y verduras, posos de café y algún material estructurante en menor cantidad como servilletas o cartón  troceado. La clave siempre está en mantener  un nivel de humedad adecuado y que el sustrato que estamos formando  este convenientemente aireado, por eso es tan importante el material estructurante.

Puedes encontrar toda esta información ampliada en nuestra guía básica para el vermicompostaje. https://www.multihuerto.es/empezando-a-alimentar-a-nuestras-lombrices

No, y este es un error muy común. 

El humus líquido o té de lombriz se recolecta una vez nuestras lombrices han convertido los desechos orgánicos en humus, y se consigue a costa de "lavar" este abono. El proceso consiste en esperar a tener humus y  entonces regarlo de forma lenta  para extraer el humus líquido o té de lombriz.

Los lixiviados en cambio no son más que los restos líquidos de la materia orgánica con la que alimentamos a nuestra lombriz. y nunca deberíamos buscar tenerlos. Es cierto que los restos orgánicos en descomposición pueden llegar a gotear, por eso incluimos una bandeja en la parte inferior del vermicompostador. Podemos aprovechar algo de este líquido para volver a regar nuestro vermicompostador, pero no debemos buscar extraer lixiviados haciendo un riego excesivo, ya que solo conseguiremos apelmazar la materia orgánica, el alimento y el hábitat de nuestras lombrices.

Si tu vermicompostador produce lixiviados de forma más o menos continua.. tienes un nivel de humedad muy alto,  bien por mucho riego, bien porque no estás estructurando convenientemente.

Puedes encontrar información ampliada en este artículo de nuestro blog, en la sección Guías.

https://www.multihuerto.es/a-vueltas-con-los-lixiviados

La bandeja está pensada o bien  para recoger  el exceso ocasional de líquidos que se pueden producir si alguna vez se te va la mano con el riego o no has estructurado convenientemente los restos, o bien para recoger el Te de lombriz cuando vamos a cosechar humus. 

En el primer caso estos lixiviados deberían volver al vermicompostador ya que son una parte importante del alimento de nuestras lombrices, además si se producen frecuentemente son una señal   de que  tendremos problemas por exceso de humedad, si encima huelen es que ya está pasando algo. En este caso hay que reducir la  humedad y añadir  mas estructurante (cartón, papel , hojas secas…) 

Es importante que sepas que un vermicompostador se debe mantener una humedad del 80%  en la que ni siquiera gotea.

En el segundo caso, no olerá ya que se trata de un liquido que hemos obtenido al lavar mediante riego un material  ya estabilizado. Además lo hemos hecho en el momento de la cosecha y por ello no perjudicara ni al proceso ni a las lombrices.

Puedes encontrar información ampliada en este artículo de nuestro blog, en la sección Guías.

https://www.multihuerto.es/a-vueltas-con-los-lixiviados

Si, puedes añadirlos mezclados con los demás restos pero no en gran cantidad. Te llevaras una sorpresa cuando descubras como le gusta a la cría el limón.

En realidad comen de todo pero necesitan su propia “dieta mediterránea” y con esto me refiero a una dieta variada ;) 

Hay cosas que se comen directamente y otras que esperan a que su composición cambie durante su descomposición, no tardaras en ver qué tipos de restos desaparecen por arte de magia del vermicompostador mientras que otros ni los tocan hasta que no se degradan.

Las llamadas lombrices de california tienen una glándula calcífera donde producen la cal necesaria para rebajar la acidez del alimento. No obstante  un exceso de acidez también las puede matar. Cítricos y alimentos ácidos como el tomate  si pero sin que sea parte principal de su dieta.

Puedes encontrar información sobre su alimentación en nuestra guía básica de vermicompostaje. 

https://www.multihuerto.es/guía-básica-vermicompostaje

El reciclaje mejora el mundo y un pequeño vermicompostador te ayuda a reciclar una parte de tus residuos que es muy contaminante. Fíjate... entre el 8 y el 10% de los gases de efecto invernadero, se producen por culpa de la descomposición de los restos orgánicos en los vertedero.

Gracias al vermicompostaje podrás reciclar la fracción orgánica de tus residuos y producir humus de lombriz, el mejor y más natural  de los abonos. Reducirás  tus residuos junto con tu  huella de carbono en el planeta, y lo que a mí me parece mas importante,  darás un paso de gigante hacia una economía circular  transformando  desechos orgánicos en un valioso recurso.